Sacar a pasear a nuestros amigos peludos es una de las actividades más agradables tanto para el perro como para el dueño.
Sin embargo, puede llegar a ser frustrante cuando tu perro decide pararse y se niega a moverse durante el paseo.
Este comportamiento puede ser preocupante, sobre todo si nunca ha ocurrido antes.
Si éste es el caso de tu peludo amigo, ¡no te preocupes! Te daremos algunos consejos para afrontar este problema.

¿Por qué se para mi perro durante los paseos?
Antes de profundizar en las soluciones, es crucial determinar por qué tu perro se para durante los paseos. Hay varias razones:
Limitaciones físicas: Si los perros sienten dolor o incomodidad, dejarán de pasear. También pueden sufrir calambres musculares, debilidad o incluso artritis.
Factores ambientales: Los ruidos fuertes, las personas desconocidas y otras mascotas pueden provocar ansiedad o miedo en los perros, haciendo que dejen de caminar.
Miedo: Los perros son animales ansiosos por naturaleza, y a veces las vistas, sonidos y olores nuevos pueden provocarles miedo y hacer que teman continuar el paseo.
Aburrimiento: Si los paseos les resultan monótonos, los perros pueden dejar de pasear para buscar nuevas formas de entretenerse.
Cómo afrontar el problema
Ahora vamos a abordar cómo afrontar este problema. He aquí algunos consejos para que tu perro vuelva a pasear:
Visita al veterinario
Si tu perro deja de pasear en forma seguida, lo mejor es descartar cualquier problema de salud subyacente. Programa una cita con el veterinario para comprobar si hay algún problema que haga que tu peludo amigo deje de pasear.
Acondicionamiento gradual
Si el veterinario confirma que el perro está sano, condicionar gradualmente al animal a los paseos puede ayudar. Empieza con paseos breves, y luego aumenta progresivamente la distancia. Este ejercicio ayuda al perro a adquirir resistencia y fomenta una asociación positiva con el paseo.
Investiga su entorno e identifica el desencadenante
A veces los perros tienen un motivo para dejar de pasear, ya sea algo en su entorno que les causa miedo o ansiedad. Investigar su entorno puede ayudar a identificar posibles obstáculos, sonidos u olores que desencadenen el comportamiento indeseable.
Una vez identificados, evita esos desencadenantes o entrena a tu perro para que se sienta más cómodo con ellos. Una manera de averiguar esto es cambiando totalmente el lugar de paseo a uno con terreno, sonidos u olores totalmente distintos a los habituales.

Lleva golosinas y juguetes
A la mayoría de los perros les encantan las golosinas y los juguetes, y llevarlos a los paseos puede ser una forma estupenda de mantenerlos ocupados. Además, una golosina o un juguete pueden utilizarse como refuerzo positivo cuando el perro camina sin parar. Al asociar las golosinas con un comportamiento positivo, tu perro se sentirá motivado para seguir paseando.
Usa un arnés o un collar
Los perros que tiran pueden causar molestias, sobre todo si llevan correa y collar. A veces, un simple cambio de collar a arnés puede suponer una diferencia significativa. Además, esta sujeción mantiene al perro en una posición más cómoda, reduciendo la presión sobre el cuello, que puede causar dolor al tirar.
Ten paciencia
Recuerda, los perros son criaturas sociales que prosperan con el refuerzo positivo y la interacción humana. Sin embargo, tu amigo peludo puede necesitar tiempo para adaptarse a nuevos entornos, rutinas de ejercicio y experiencias. Por tanto, sé paciente y constante para ayudar a tu perro a disfrutar de los paseos y frenar el comportamiento de pararse.
Conclusión
En resumen, que los perros se paren durante los paseos es un problema común, pero que puede tener diversas causas. Comprender las razones que lo provocan y condicionar gradualmente al perro a los paseos puede ayudar a menudo. Ten paciencia y no temas pedir ayuda a un veterinario o a un adiestrador canino profesional. Con paciencia y constancia, tu peludo amigo pronto volverá a pasear felizmente contigo.